5 pautas para lograr que tus hijos se duerman temprano

5 pautas para lograr que tus hijos se duerman temprano

¿Cuantas noches es imposible hacer que tus hijos se acuesten sin rechistar? Para muchas familias el momento en el que hay que acostar a los niños se vuelve un verdadero tormento, ya que después de varios intentos fallidos acabamos cediendo a los deseos de nuestros hijos. Foto por Bligoo

Pues bien, hoy en #Velfont queremos ofrecerte algunas ideas para que tus hijos se duerman a la hora que creas conveniente:

1-. Cíñete a un horario. Debe escoger una hora para hacer que tus hijos se vayan a dormir, piensa que cada niño deberá a costarse a una hora determinada en función de la edad, las actividades extraescolares que realice y sobretodo teniendo en cuenta que ha de dormir entre ocho y diez horas diarias. Oblígate a cumplir este horario, ya que de ello dependerá que él se acostumbre y acabe cumpliéndolo por si solo.

2-. Despiértalos  siempre a la misma hora. Levanta a tus hijos siempre a la misma hora, si es temprano mucho mejor, puesto que se acostumbrarán y se dormirán temprano. Ten mucho cuidado con la siestas, no deben ser más largas de 45 minutos.

3-. A la ducha! Un buen baño antes de irse a dormir siempre ayuda… Toma el momento del baño como un momento de relax y en el que hay que preparase para ir a dormir. Si ves que eso no es suficiente usa esencias de lavanda o jazmín en el baño, para que se relajen y sean capaces de conciliar el sueño más rápido.

4-. Silencio. Esta es una pauta aparentemente sencilla, aunque es fundamental que en casa reine el silencio una vez los hayas mandado a dormir. El silencio tranquiliza y relaja a los niños.

5-. Evita el ejercicio físico. Cualquier actividad física provoca una gran carga de energía, si además se realiza minutos antes de irse a dormir, estás perdido, no conseguirás que duerman. Así que no olvides que la actividad física estimula a que los niños estén más despiertos y alerta.

Es vital introducir la rutina del sueño en tus hijos, ármate de paciencia y recuerda que todo requiere tiempo y constancia. Una vez logres que tus hijos hayan adquirido este habito, dormirán mejor, estarán de mejor humor, estarán más vivos en el cole y sobretodo, tendrás tiempo para ti.