Dormir más te hará más inteligente

Dormir más te hará más inteligente

Te despiertas durante la madrugada, cuando todo está oscuro y las luces de la calle aún siguen encendidas. Quedan horas escasas para que empiece esa reunión tan importante y necesitas empezar el día un par de horas antes para acabar de ultimar todos los detalles. Así que, para vencer al sueño que aún no se ha ido de tu cuerpo, decides tomarte la segunda taza de café de la jornada. ¿Te suena esta historia?

Pues, aunque cueste creerlo, reducir horas de sueño para aumentar en horas de trabajo, estudio o preparación es la peor estrategia que puedes seguir. Inconscientemente, hemos ido restándole importancia al hecho de dormir. Para muchos, dormir es una función vital. Como un mero trámite que se debe cumplimentar al final de cada jornada. Y eso es un error fatal.

Cuando dormimos, nuestras funciones corporales se autorregulan y nuestro cuerpo se regenera. Los sistemas cardiovasculares, respiratorios y el cerebro necesitan de esta pausa diaria para poder seguir funcionando con normalidad. En el caso del cerebro, utiliza el tiempo de descanso para reestructurarse y procesar toda la información del día anterior. Algo crucial para funciones tan necesarias como la memoria.

Dormir es vital para mejorar tu memoria

Herman Ebbinghaus, un psicólogo del siglo XIX, aseguró que olvidamos el 40% de la información, 20 minutos después de recibir un nuevo mensaje. Es lo que se conoce como Forgetting Curve (la curva del olvido). Este proceso de olvido casi instantáneo de la información puede ser apaciguado por lo que el mismo Ebbinghaus denominó como el proceso de consolidación.

Este proceso hace referencia al traslado de información de la memoria a corto plazo, a la memoria a largo plazo. Para conseguir que este proceso sea efectivo se necesita la ayuda del hipocampo, una parte del cerebro que, además de ser la responsable de todos los procesos mentales relacionados con la memoria, también regula los estados emocionales.

Esta claro que el hipocampo es imprescindible para que la reunión que tienes mañana a primera hora salga de maravilla. Y no sólo por la latente necesidad de memorizar todos los datos que necesitas exponer, si no que, además, dormir bien te ayudará a templar los nervios y estar más receptivo durante la jornada. Para que el hipocampo funcione bien y te ayude a recordar toda esa información necesitas tener una noche de descanso placentero.

Vete a la cama justo después de memorizar información

Los científicos han demostrado que, durante la fase de sueño REM -el momento en el que tenemos un sueño más profundo- los movimientos de información del hipocampo se hacen más latentes. De hecho, la información procesada viaja, repetidamente a través del hipocampo durante la fase REM. A más horas de sueño, más intensidad y frecuencia de datos se procesaran.

Según Shai Marcu, “irse a dormir 3 horas después de memorizar algo, es la forma más ideal para retener información”. Dormir un mínimo de 8 horas diarias es el camino más corto para fortalecer tu retentiva, ser más eficiente y mejorar tus habilidades comunicativas. Así que, la próxima vez que alguien te sugiera madrugar para preparar el examen de mañana o la presentación que tienes con tus nuevos clientes, le puedes negarte rotundamente.