Primero decidimos si íbamos a pintar la pared azul o rosa. Luego, escogimos toda la decoración de la habitación, tratando de conjuntar los muebles con cierta gracia. Finalmente, compramos la cama para nuestro hijo. Pero: ¿dedicamos el tiempo necesario para escoger el colchón sobre el que iba a dormir durante los años más cruciales de su vida?
Según informa la BBC, los bebés deben dormir unas 16 horas al día, mientras los adolescentes deben acostumbrarse a descansar 8 horas. Hasta los dos años, nuestro hijo dedicará 9.500 horas a dormir, y estará despierto unas 8.000. Estas horas de sueño influirán en su desarrollo físico y psicológico. Los expertos en descanso de Velfont te cuentan cómo ayudarles a dormir mejor.
Colchones para bebés
Para las primeras etapas de nuestros hijos, los pediatras recomiendan colchones duros para evitar que se hundan en ellos. La transpirabilidad también es uno de los factores clave para cuidar de nuestros pequeños. No importa si son colchones de muelles, látex o viscoelástica, mientras cumplan estos requisitos.
Es importante tener la protección adecuada para el colchón. A estas edades, los fluidos corporales son difíciles de controlar. Poder lavar los complementos del colchón frecuentemente mejorará su higiene y descanso.
Además del confort, en el caso de los bebés debemos cuidar también su seguridad. Es importante comprar un colchón del tamaño exacto de su cuna: no queremos que haya huecos donde pueda quedarse enganchado. Además, otro punto interesante es que los bebés no deben tener almohada hasta cumplir dos años para evitar el riesgo de asfixia.
A medida que nuestro hijo crece, sus necesidades van a cambiar. Para cuidar de su descanso, deberemos prestar especial atención a los siguientes factores:
Cuidado de la espalda
La tendencia de comprar a los niños mochilas de ruedas se debe simplemente a un intento de mejorar la salud de su columna vertebral. ¿Por qué no íbamos a cuidar de su postura también a la hora de descansar?
Según apuntan desde ABC, el 80% de la población española experimentará en algún momento de su vida dolor de espalda. Debemos encontrar colchones que eviten los puntos de presión: el látex y el viscoelástico son materiales recomendables. Tu hijo aún no puede cuidar de la salud de su espalda: ayúdale tú.
La temperatura del colchón
Cuando dormimos, nuestra temperatura corporal baja. Estar en un ambiente fresco, entre los 17 y 20 grados, facilita la conciliación y mantenimiento del sueño. El material del colchón de nuestro hijo, además de ser hipoalergénico, debe facilitar la circulación del aire para evitar subir la temperatura. No sólo mejoraremos su descanso, sino también su salud.
¿Cada cuando debería cambiar su colchón?
Nuestros hijos están en pleno crecimiento. Si en los adultos se recomienda cambiar el colchón cada 10 años, en el caso de los niños estamos hablando de vidas útiles de unos 5 años. Esto nos permitirá variar la firmeza de su colchón a medida que crecen: inicialmente podemos optar por una firmeza 1 para ir pasando progresivamente de la firmeza 2 a la 3.
Protege la cuna y el descanso de tu bebé
Los artículos Velfont para cuna están pensados para garantizar la máxima higiene y protección y para lograr un confort óptimo en el descanso de los más pequeños.