Los mitos del sueño de los bebés

Los mitos del sueño de los bebés

A lo largo de sus primeras semanas de vida, los bebés suelen reclamar constantemente la presencia de la madre o el padre casi a todas horas. Se sienten tranquilos, seguros y protegidos si los recuestan en sus calurosos brazos, algo que creen que les asegurará la supervivencia cuando estén descansando.
Sin embargo, ¿deben dormir solos o en la misma habitación que sus padres? ¿Necesitan un horario de sueño establecido? ¿Puede dormir en una silla-balancín? Muchas son las dudas y los mitos que circulan sobre el descanso de los más pequeños. Desde Velfont queremos indicar cuáles son las verdades que los padres deben tener en cuenta y cuáles son las mentiras que debemos suprimir de nuestras mentes:

  • Los bebés no necesitan un horario de sueño establecido: FALSO. De hecho, los recién nacidos se benefician de un horario regular por la noche y a la hora de echar la siesta.
  • Siempre se despiertan durante la noche: FALSO. Como los adultos, los bebés pueden despertarse varias veces. No obstante, es a partir de los 6 meses de edad cuando pueden dormir de forma continuada.
  • Algunos niños no llegan nunca a dormir correctamente: FALSO. En un principio, todos los recién nacidos pueden llegar a descansar como es debido y sin problemas. Sin embargo, si los padres tienen muchas dificultades alrededor de este tema, siempre es preciso consultar un pediatra.
  • Dejar ver la tele al niño antes de dormir puede relajarle: VERDADERO. No obstante, debe ser durante poco tiempo y unos minutos antes de meterse en la cama. Además, es preciso que no se alargue más allá de las 21 horas y recomendable controlar los contenidos que puede visionar.
  • El bebé no debe quedarse dormido en los brazos de sus padres: VERDADERO. Puede pasar, pero es aconsejable que a partir de las 6 semanas el recién nacido ya aprenda a descansar solo en una cama individual.
  • Si se acuesta tarde, se dormirá más rápido y mejor: FALSO. Los expertos recomiendan acostar a los pequeños a una hora razonable y prudente, mucho antes de que lo hagan los padres.
  • Los bebés que no duermen siesta, duermen más horas durante la noche: FALSO. En ocasiones, cuando los niños están muy cansados pueden incluso presentar dificultades para conciliar el sueño por la noche.
  • Algunos no necesitan dormir siesta: VERDADERO. A medida que van creciendo, ciertos niños no necesitan siesta.
  • Los hermanos no deben dormir juntos para no molestarse mientras duermen: FALSO. Si tienen la misma disciplina para dormir y las mismas rutinas, no tiene que haber ningún inconveniente en que duerman juntos.