El protector de colchón más adecuado para un colchón viscoelástico

El protector de colchón más adecuado para un colchón viscoelástico

Un colchón viscoelástico, por su composición viscosa, suele dar más calor que un colchón de muelles. Los colchones viscoelásticos gracias a sus propiedades y composición, se adaptan a la forma de nuestro cuerpo y, debido a nuestro peso, nos envuelven en una medida superior, con lo que al acostarnos, la sensación de calor puede ser más acusada. A la hora de escoger el artículo de protección más adecuado, es imprescindible que éste sea transpirable o la humedad que desprenda nuestro cuerpo no se eliminará correctamente de su interior acabando por estropearlo.

Para este tipo de colchones, las fundas de colchón más recomendables son las de tejidos naturales transpirables, como el algodón o el bambú. Las fundas de colchón son un elemento de protección integral para el colchón puesto que lo protegen por la parte superior e inferior cerrándose con cremallera y ajustándose a la forma del mismo. Si además se quiere proteger el colchón  con un protector impermeable, es imprescindible que éste sea también transpirable, esto es, que el protector tenga una base de poliuretano transpirable (PU)  o híper-transpirable (HPU). De esta manera, se protege el colchón viscoelástico de líquidos y manchas al mismo tiempo que se obtiene una completa transpirabilidad (transpirabilidad que es superior si la base es de HPU). Además, este protector no sólo permitirá que el colchón transpire, sino que también nos aportará sus propiedades transpirables a nosotros permitiendo que nuestra piel respire libremente, evitando la sensación de calor y sudor que proporcionan otros artículos de protección impermeables no transpirables.

En el caso de sufrir mucho calor con este tipo de colchón, es recomendable utilizar productos  termo-reguladores como el cubrecolchón TERMO-Regulador de Velfont que combina el relleno 100% algodón con el tejido Outlast® Adaptive Comfort® que ayuda a amortiguar los cambios de temperatura bruscos que sufrimos durante las diferentes fases del sueño y, por lo tanto, ayuda a regular la temperatura corporal evitando la sensación de calor intensa.  Esta es la mejor opción para combinar la protección del colchón y la regulación de la temperatura, evitando la sensación de calor intensa.