5 trucos para dormir cuando estás nervioso

5 trucos para dormir cuando estás nervioso

Una entrevista de trabajo, un examen que nos trae de cabeza, un viaje… Cualquiera de estos motivos puede estar detrás de que, de repente, una noche te cueste dormirte más de lo normal. Esto es insomnio y es uno de los principales problemas para dormir al que nos enfrentamos la mayoría de nosotros, de hecho, afecta al 25% de la población

Estamos acostumbrados a lidiar con el insomnio cuando cambiamos de hora, por el jetlag tras un viaje e, incluso, cuando tomamos ciertos medicamentos que lo provocan, sin embargo, nos olvidamos de que nuestro bienestar también influye en nuestras horas de sueño y, lo más importante, de descanso.

Dejar los nervios fuera de la habitación no siempre es fácil, pero te ayudará saber que existen una serie de consejos para relajarse antes de ir a dormir. Aquí van:

1. Rutina antes de irte a dormir

Lo que hagamos las horas antes de acostarnos será clave para garantizarnos las horas de sueño. Esto se traduce en evitar el ejercicio –a no ser que tu elección sea una clase de yoga que te ayudará a relajarte– las 5 horas previas al acostarte. La práctica moderada de deporte durante el día te ayudará a liberar tensiones, pero fuera de tiempo será contraproducente. La mejor recomendación que podemos darte es que te pegues una ducha media hora antes de dormir y que te acuestes lo antes posible, que cuando el sueño llegue nos pille en la cama.

2. Atención a la alimentación

El primer paso es evitar consumir bebidas que contengan cafeína o cualquier otro estimulante al menos 5 horas antes de irnos a la cama. Esto puede parecer evidente, pero piensa, ¿cuántas veces te has tomado un café para aguantar más horas estudiando y luego has intentado dormirte como si nada? Imposible.

Algo similar ocurre con la comida. Decántate por alimentos ligeros y, sobre todo, come tranquilamente, masticando cada bocado y sin distracciones de la televisión o el teléfono móvil. Así facilitarás tu digestión y adelantarás el momento en que tu cuerpo está preparado para irse a descansar.

3. Despídete de los pensamientos negativos

Es muy probable que la noche antes de ese acontecimiento que tantos nervios nos genera nos metamos en la cama y no consigamos dormirnos a la primera. Es un clásico que en este momento nos invadan pensamientos negativos del tipo “No me voy a poder dormir” y “No dormiré nada y mañana estaré cansado” o preguntas como “¿Cuánto tiempo aguantamos sin dormir?”. Para, todo esto boicotea nuestro descanso. En su lugar, prueba a mantener tu cabeza relajada y si ves que estás completamente desvelado lee un libro o escucha música muy suave.

4. Prueba con ejercicios de relajación para dormir

Desde meditación y yoga, a aprender a controlar tu respiración, las alternativas de ejercicios para mitigar los nervios antes de ir a dormir son infinitas. La única recomendación que debes tener en cuenta es la de practicarlos en un lugar tranquilo, con ropa cómoda y mejor si ya estás acostado en tu cama.

Para empezar prueba con este que te proponemos: Cierra los ojos, inspira profundamente, sigue el recorrido que hace el aire a través de tu cuerpo y expira lentamente. Repite tantas veces como necesites.

5. Ríndete al ruido blanco

Suele utilizarse para tranquilizar y facilitar el sueño de los bebés, pero el ruido blanco también es muy útil para propiciar el descanso de los adultos, especialmente cuando el insomnio es consecuencia de un estado de nervios. ¿Qué es exactamente el ruido blanco? Es el ruido de un televisor o una radio sin sintonizar, el sonido de los aires acondicionados, es decir, cualquier señal o sonido que contiene todas las frecuencias y estas son de la misma potencia. ¡Pruébalo!