No dormir bien tiene efectos diversos: falta de energía, somnolencia, bajo rendimiento, dolores corporales… El estrés, la ansiedad y los nervios a los que estamos sometidos perjudican gravemente nuestra salud a muchos niveles, y el impedimento del sueño es posiblemente el más común. Pero no dormir no solo compromete nuestra productividad… También nuestro aspecto. Estudios científicos constatan que un buen descanso mejora nuestro aspecto y que el insomnio o los problemas para conciliar el sueño son el peor enemigo de la belleza. Piel apagada, ojeras, imperfecciones, falta de oxígeno… ¿Por qué un buen descanso cuida nuestra piel? ¿Qué pasa por la noche?
Seguramente ya has oído muchas veces que, para lucir una piel de bebé, hay que dormir como un bebé. Sí, sabemos que esto es imposible con el ritmo de vida que llevas, pero al menos hay que intentarlo. Dormir bien permite que las células de la piel se regeneren más rápidamente. Respiramos más lenta y profundamente, lo que favorece que la epidermis se oxigene mucho mejor: los efectos sobre la misma son prácticamente instantáneos. Te damos tres razones por las que deberías dormir las horas necesarias, normalmente entre siete y ocho.
- Renovación: durante la noche, nuestra piel no está expuesta a agentes externos, por lo que logra renovarse sin problemas. Si conseguimos un buen descanso, habrá una mayor producción de moléculas que le den brillo y elasticidad a la epidermis. De lo contrario, aceleraremos la opacidad y la acentuación de ojeras, arrugas y líneas de expresión.
- Regeneración celular: si no dormimos, le robamos años a nuestra vida. Recuerda que durante la noche se regeneran las células de la piel, por lo que todas aquellas imperfecciones existentes van curándose a medida que transcurren las horas. Un buen descanso acelera esta curación y evita que tu piel parezca envejecida. La juventud tiene que mantenerse.
- Mejor oxigenación: cuando la piel está descansando, respira más profundamente y se oxigena mejor, un efecto que hace que aumente su permeabilidad. Si quieres mantener tu piel hidratada, aprovecha este proceso y aplícate cremas antes de acostarte.
- Evita enfermedades: además de corregir pequeñas imperfecciones, un buen descanso nos ayuda a evitar enfermedades graves en la piel. El sueño fortalece la epidermis y, además, todas las partes del cuerpo.