Puede que noche tras noche te cueste conciliar el sueño. Si es así, te parecerá inverosímil que existan fórmulas para dormir que pueden ayudarnos a entrar en un sueño profundo en pocos segundos. Sí, incluso a los que, por norma general, necesitan programar su descanso con antelación y se meten en la cama con la certeza de que todavía tardarán unos minutos –puede que sean horas– en quedarse dormidos.
Si sufres algún trastorno del sueño es muy probable que hayas probado todo tipo de remedios para tratar de regularizar tu sueño. Cuidar la higiene de nuestro sueño es un buen hábito que solemos pasar por alto. Una de las medidas más efectivas para lograrlo es seguir una rutina las horas antes de irnos a dormir. Si cada día antes de acostarnos realizamos las mismas tareas casi de forma ritual conseguiremos que nuestro cuerpo y mente se acostumbren y entiendan que ese es el preludio del sueño.
Es fundamental, para que esto funcione, que además tratemos de alejarnos al máximo de nuestro teléfono móvil y el resto de pantallas. Contar con un día para desconectar sería ideal, pero el détox digital es básico y especialmente necesario por las noches ya que la luz de estos dispositivos altera por completo nuestros ritmos circadianos.
Una técnica para antes de dormir
Sin embargo, notar los efectos de estas medidas puede llevarnos tiempo y en algunos casos es posible que aún tomando todas estas precauciones nos cueste dormir profundamente. Por eso la idea de dormirse en 60 segundos puede ser especialmente necesaria para muchos de los que nos estéis leyendo y lejos de ser una falsa promesa, esto tiene una base científica.
Sí, el Dr. Adrew Weil, médico de la universidad de Harvard, asegura haber dado con un método infalible para quedarse dormido en tan solo un minuto. El método, que ya se conoce como ‘Técnica 4-7-8’ debe realizarse justo antes de irse a dormir y consta de 3 sencillos pasos que, según el experto, nos generarán una sensación de relajación que se traducirá en un sueño reparador.
¿En qué consiste la técnica 4-7-8?
Básicamente es un ejercicio de relajación y para completarlo deberás sentarte sobre la cama, con la espalda bien recta –si lo necesitas puedes apoyarte sobre una superficie que actúe como respaldo–.
Una vez en esta posición inhalaremos el aire por la nariz mientras contamos hasta cuatro. Después aguantaremos la respiración durante siete segundos. El último paso es exhalar el aire durante 8 segundos. Una vez lo hayas expulsado todo deberás volver a repetir la secuencia tres veces más. Cuando hayas terminado, podrás tumbarte y esperar. En poco tiempo, cuenta Weil, el sueño hace acto de presencia.
La constancia dice este doctor es la clave de la técnica 4-7-8 ya que, a medida que la practiquemos, estaremos ejercitando nuestro cuerpo y preparándolo mejor para el sueño.
